¿Qué hago cuando tu mirada me traspasa, y yo indefenso quedo con todo en ascenso y con mi boca inspirada? Busco la tinta adecuada para poder escribir, lo que quisiera decir ahí a tu oído pegado; en donde luego, extenuado poder quedarme a dormir.
Porque me miras y creo que en el instante me extingo, y ya no sé si distingo entre el amor y el deseo. Que mil maneras ideo para a tu cuerpo pegarme, y hasta tu explosión quedarme dentro, contigo y en ti; y tú te quedes en mi hasta de amor extenuarme.
Porque si miras provocas del poeta los instintos, con que si es que puedo pinto de la lujuria más loca, el maquillaje en tu boca para iniciar el viaje, por tu cuerpo, y el mensaje sea llenarte de amor; y dejarte mi sudor como un ardiente tatuaje.
Entonces mi letra baja por todos tus accidentes, y cada vez más ardiente entre tus pechos baraja, la más húmeda ventaja que entre tus labios espera, el más amoroso beso que voy a dejar impreso rodeado de tus caderas.
Ah!!! Por eso si es que miras a mis ojos ten cuidado, de dejarme encadenado a un deseo que no expira. E incluso cuando giras y de mis manos te alejas, lleno de deseo me dejas que solo pienso mujer: en cómo quisiera ser el que en tu piel se refleja.
Nunca he tenido un equipo de fútbol favorito, pero el 5 de junio de 1991, fui testigo de ese partido porque mi suegro y mi concuñado lo vieron mientras yo estaba escribiendo en el mismo lugar. Recién terminado el partido escribí este poema que hoy comparto.
Todo Chile en la emoción dentro del monumental, es historia nacional Colo-Colo fue campeón.
Todo Chile expectativo El día cinco de junio, con la luna en plenilunio creciente mientras escribo. El cacique muy altivo echó a la cancha a Morón, Margas tras él a la acción Lizardo Garrido atrás dice: ¡Vamos a ganar, todo Chile en la emoción!
Luego Ramírez prosigue pa’ completar la defensa, Vilches equipo compensa mientras la copa persigue. A Mendoza, Herrera sigue este se fue a accidentar, Pato Yáñez al hospital acompaña al compañero; mientras ruge un pueblo entero dentro del Monumental.
Rubén Espinoza sale al medio campo a cubrir, Pizarro le dice: ¡Aquí! El capitán bien se vale. Que el equipo sólo cale Josic la orden les da, Bartichoto ataca y va junto al equipo araucano; como juegan mano a mano es historia nacional.
Juan Carlos Peralta anda adelante con Luis Pérez, quien al doce y diecisiete dos bonitos goles manda. El público en la baranda ruge con el corazón, cuando Herrera hijo ‘e león anota al ochenta y cinco; todo Chile pega un brinco Colo-Colo fue campeón.
Por fin chilenos hermanos salen todos a la calle, que se griten los detalles la copa está en nuestras manos. Ahora a Japón vamos a cubrirnos de más flores, de América los mejores que ningún país estrile; al fin se ha queda’o en Chile la Copa Libertadores.
¿A quién le escribiste eso? Es la típica pregunta, que toda persona adjunta cuando un sentimiento expreso. A veces, pregunta al hueso la que pretenden hacer ¿Y por qué quieren saber? Preguntan ¿Con que intención? ¿Acaso la inspiración se debiera detener?
¿A quién le escribiste eso? Pregunta aquel que lee y que comúnmente cree saber lo que no confieso. Porque ni yo tengo acceso a algunos sentimientos, que hacen que mi pensamiento se convierta en poesía, y escriba con la agonía de lo que en mi pecho siento.
¿A quién le escribiste eso? Muchos suelen preguntar y yo ¿Quiero contestar lo que en mi verso profeso? ¿A quién preocupa el exceso de mi palabra mejor? ¿A alguien causa dolor? ¿O simplemente fastidia a quien mira con envidia que se escriba con amor?
¿A quién le escribiste eso? Digo, es muy recurrente. Anda pendiente la gente de mi verso más travieso. Todo el deseo que profeso con mi letra enamorada, por todos es cuestionada como si fuera delito, hacer un poema bonito a la razón deseada.
¿A quién le escribiste eso? ¿¡Y que importa a quien le escribo!? Yo en mis letras me desvivo y de amar, ni un rato ceso. Porque de amar vivo preso y no tengo escapatoria, mi amorosa trayectoria que a la musa hoy quema; mostrará que mi poema tiene muy mala memoria.
Autoediciones ONMANGUE, agrega nuevos títulos a su catálogo: “Autobiografía histórica del Manguera, en décimas”, “Si es que lanzo un beso al viento” y la novela “Entrecanto”; los que se suman a “La poesía tradicional chilena” en una segunda edición; y a “Obviamente El Manguera”. Además se reedita “Recuerdos olor a humo y otros cuentos” y “De pecados”.
Si es que lanzo un beso al viento Poesía popular, romántica. 21×14 cms. 108 páginas
Brindando con El Manguera, Volumen 2.
Brindis escritos en décima, sobre diversos temas. 13×10 cms. 32 páginas.
“Brindaré por la empanada, nuestra empanada chilena; con carne molida es buena, mejor con carne picada. De horno, ojala dorada, con pasas, huevos y todo, la aceituna a su modo hacen que quede sabrosa; y si te queda jugosa el caldo corre hasta el codo.”
De pecados.
Poesía de estilo libre, y de temática erótica. 20×13 cms. 68 páginas. “…Estás casada y tu sabes que debes disimular lo que despierta en tu centro el poeta cuando escribe, proponiéndote el Olimpo en el oído que tiene tu alma virgen aún de carne…”
La poesía Popular Tradicional Chilena.
Ensayo sobre la Poesía Popular en Chile, explicando su origen y desarrollo. Todas las explicaciones del tema van acompañadas de ejemplos poéticos, para su mejor entendimiento. 20×13 cms. 96 páginas.
“…Los chilenos contamos con una cantidad enorme de adivinanzas, dichos, refranes y chascarros en nuestro quehacer cotidiano. Gran cantidad de estos, han sido creados en el lenguaje de la Poesía Popular.
No esperen en este trabajo descripciones Técnicas exquisitas, no. Para eso estamos llenos de ratoncitos de bibliotecas y estudiosos de la lengua. Este trabajo pretende ser entendible, simple, porque quiero que la poesía sea popular por Nacional y por Querida, entonces anhelo que todo chileno sepa de qué se trata…”
Palabras.
Palabreos.
Palabrotas.
Trilogía de poesía de estilo libre de temática erótica. 20x13cms. 68, 56 y 60 páginas respectivamente.
“…La musa antigua tiene la vieja corona de ser aún la primera… …y el poeta sigue libre…”
Recuerdos olor a humo, y otros cuentos.
Cuentos de temática erótica. 20×13 cms. 60 páginas.
“…Nos abrigamos bien para salir a la fría noche invernal. Nos mirábamos persistentemente. Antes de salir, nos abrazamos. Metí las manos bajo su ropa y acaricié su espalda, que tanta falta me hacía. Me di cuenta que tampoco llevaba sostén. Ella hizo lo mismo. Metió su mano bajo mis pantalones y me apretó los glúteos. No dijimos nada. No era necesario. Salimos a la lluvia de la mano. No hablamos nada en todo el camino. Yo por mi parte quería quedarme con su olor y con el eco de sus quejidos de deseo y placer en el oído para siempre, así que no interrumpí su silencio…”
Romances.
Poesía escrita al estilo del romancero español, pero dividida en capítulos. Temática romántica. 20×13 cms. 56 páginas.
“…Serás la única flor que brillará en sus viñedos, y de tus ojos saldrán mil versos y cantos nuevos… Entonces dirá el poeta: – Eres la musa que espero…, eres el pasaje de ida para llegar hasta el cielo…”
Yo soy un poeta obrero. Poesía Popular. Cuartetas, brindis, versos. Y un trabajo en décimas y cuecas extenso que da el nombre al libro. 20×13 cms. 40 páginas.
“…Voy arrimarme a la mesa para compartir mi pan, y los que a mi lado están compartirán cada pieza. De este cuerpo que embelesa mi verso, el canto y el vino; siendo industrial, campesino pa` hablar de mi clase entera; mientras haya lucha obrera ese será mi camino…”